Tras un pregrado en humanidades en Atlanta y una maestría en pintura del Pratt Institute (Nueva York), se radicó en Medellín en 1971, donde hizo parte de la escena artística local y enseñó en la Universidad Nacional de Colombia. Influida inicialmente por el expresionismo abstracto y el arte pop, desarrolló un lenguaje personal de colores planos donde la belleza de la naturaleza resulta a menudo asediada por la violencia y el descontrol. Entre sus reconocimientos está haber sido presentada, en el marco del XI Salón Regional de Artistas (2005), como “maestra del arte antioqueño» y la retrospectiva póstuma Flores para Ethel Gilmour (1940-2008): homenaje, Museo de Arte Moderno de Medellín (2010).

Colombia bien, Colombia no tan bien | 1983 | Oleo sobre metal | Dimensiones: 64 cm x 8 cm x 5 cm